Cronología:
Civilizaciones Perdidas
Nubia es el nombre que reciben las tierras del Nilo Medio, desde la primera catarata en Asuán hasta su unión en Khartum con el Nilo Blanco y el Nilo Azul.
En la actualidad, este territorio, al que los antiguos egipcios denominaban Kush, se encuentra dividido entre las repúblicas de Egipto y Sudán.
En los textos egipcios se menciona a Nubia como "la tierra de oro".
Egipto codició a Nubia por su acceso a los exóticos productos del corazón del continente, y el imperio de los faraones luchó por conquistarla una y otra vez.
Sin embargo, fueron los nubios quienes reinaron sobre Egipto.
Al sur del desierto del Sahara, el espacio denominado África negra experimentó una evolución cultural mucho más tardía que el África mediterránea, caracterizándose sus núcleos por una gran dispersión y discontinuidad. Destacan las esculturas en arcilla de la cultura Nok.
Relación entre Nubia y Egipto
c. 5000 a. C. Inicio del Neolítico en Nubia.
c. 3100-2686 a. C. Primer Período Dinástico.
Comercio con Nubia.
c. 2750-1000 a. C. Edad del Bronce.
Comercio con Egipto.
c. 2686-2181 a. C. Imperio Antiguo en Egipto.
La era de las grandes pirámides, como las de Keops y Kefrén.
Primeras razias en territorio nubio.
c. 2400-1050: Kerma Antiguo en Nubia.
c. 2181-2133 a. C. I Período Intermedio en Egipto.
Tiempo de crisis política y económica.
Caída del gobierno centralizado.
c. 2133-1786 a. C. Imperio Medio en Egipto.
Reunificación del Alto y del Bajo Egipto.
Anexión de la Baja Nubia y construcción de fortalezas en la frontera, ante la amenaza potencial de Kerma.
c. 1786-1552 a. C. II Período Intermedio en Egipto.
Los hicsos procedentes de Oriente Próximo invaden el norte de Egipto y someten a la monarquía local a vasallaje.
c. 1552-1069 a. C. Imperio Nuevo en Egipto.
Expulsión de los hicsos y reunificación del país.
c. 500-1200 a. C. Caída del reino de Kerma.
Egipto gobierna Nubia.
c. 1100 a. C. Despoblamiento de la Baja Nubia a causa de un cambio climático.
c. 1069-715 a. C. III Período Intermedio en Egipto.
Fragmentación progresiva del poder estatal.
Luchas por el poder entre familias e invasiones extranjeras
c. 1000 a. C. Reino de Kush.
c. 850-270 a. C. Reino de Napata.
Peye rescata Tebas y reunifica Egipto.
c. 747-656 a. C. XXV Dinastía en Egipto.
Nubia gobierna Egipto hasta la invasión del país por los asirios a mediados del siglo VII a. C.
Último período dinástico en Egipto.
Se suceden en el poder los asirios (Asurbanipal), los persas, los locales, y otra vez los persas (Artajerjes III).
c. 332/30 a. C. Alejandro Magno conquista Egipto.
Dinastía ptolemaica. Tras la derrota de Kleopatra y Marco Antonio en Actium frente a Octavio (31 a. C.), éste convierte Egipto en provincia romana.
c. 300 a. C.-350 d. C. Reino de Merode en Nubia.
Reino de Kush
El reino de Kush (c. 2600 a. C.-300 d. C.) formó una parte importante de las antiguas civilizaciones de Egipto, Roma y Grecia.
Importancia de la cultura Kerma (c. 2600 a. C.-1520 a. C.) en Nubia.
Napata (c. 1000 a. C.-300 a. C.).
Meroe (c. 300 a. C.-300 d. C.).
El recurso nubio más deseado en todos los tiempos fue el oro.
En Nubia, los faraones lo utilizaron en sus tumbas y templos.
Sin embargo, no era éste el único motivo por el que los egipcios trataban de incorporar periódicamente el territorio nubio a su imperio.
También lo fueron todos aquellos productos sólo asequibles a través de Nubia: marfil, ébano, huevos y plumas de avestruz, pieles de grandes felinos, pigmeos y otros esclavos procedentes del interior del continente africano.
Esta privilegiada situación geográfica y el control de las rutas comerciales propiciaron un estrecho contacto entre Egipto y Nubia.
Según la historiografía tradicional, Egipto mantuvo una posición de dominio sobre la antigua Nubia.
En la actualidad se toma en consideración la reciprocidad de influencias culturales entre ambas civilizaciones en virtud de su interacción.
En cualquier caso, para los faraones egipcios, Nubia constituyó siempre una región proveedora de hombres y riquezas.
Relieve de una de las Pirámides del Reino de Meroe |
Durante el Imperio Antiguo, los faraones egipcios organizaron razias y expediciones en territorio nubio.
Éste fue, por eje. el caso de Snefru, que reinó en Egipto entre los siglos XXVII y XXVI a. C.
Una inscripción de la época narra que el monarca capturó en Kush a 7.000 prisioneros y se apoderó de 200.000 cabezas de ganado.
Algunos expertos afirman que las incursiones resultaron tan frecuentes y devastadoras que despoblaron la Baja Nubia.
Siglos más tarde, un período de inestabilidad política ponía punto final al Imperio Antiguo.
A partir de 31 a. C., tras la muerte de Kleopatra, Egipto se transforma en provincia romana.
Once años después, Meroe se convierte, mediante un tratado con Roma, en un condominio.
Nubia vivirá entonces un período de cierto esplendor, con un comercio importante y embajadas como la de Nerón, en el siglo I d. C., que demuestran el interés romano por mantener buenas relaciones diplomáticas.
Sin embargo, a finales del siglo III, el emperador Diocleciano renuncia al control de Nubia y retira la frontera hasta Asuán, con lo que Roma abandona definitivamente Nubia por considerar que estaba alejada, tanto geográfica como culturalmente, del mundo clásico.
PHILAE
Philae se remonta a la época de Psamético II (c. 595-589 a. C.). El rey habría residido en Philae con ocasión de su campaña nubia, e hizo construir un pabellón dedicado a la diosa que era venerada en su ciudad natal de Sais. Posteriormente Amasis (c. 570-526 a. C.) hizo edificar un pequeño templo, ampliado más tarde por Nectanebo I (c. 380-362 a. C.).
Concebido y edificado casi completamente durante la dominación griega de Egipto, fue un lugar de culto venerado tanto por la población cosmopolita de la capital, Alejandría, como por los egipcios y por los habitantes de Nubia.
De hecho, el Templo de Philae, única excepción en todo el Imperio romano, siguió abierto incluso después del edicto de Teodosio del 378 d. C., el cual vetaba los cultos paganos.
Sólo bajo Justiniano, en el 535 d. C., el templo fue finalmente cerrado.
I Dominación Persa (c. 525-405 a. C.)
XXVII Dinastía:
Cambises c. 525-522 a. C.
Darío I c. 522-486 a. C.
Jerjes I c. 486-465 a. C.
Artajerjes I c. 465-424 a. C.
Jerjes II c. 424-423 a. C.
Darío II c. 423-405 a. C.
Artajerjes II c. 405-401 a. C.
XVIII Dinastía:
Amirteo c. 404-399 a. C.
XXIX Dinastía:
Neferites I c. 399-393 a. C.
Hakoris c. 393-380 a. C.
Psamutis (usurpador) c. 393-392 a. C.
Neferites II c. 380 a. C.
II Dominación Persa ( c. 359-336 a. C.)
XXX Dinastía:
Artajerjes III c. 359-338 a. C.
Arses c. 338-336 a. C.
Darío III c. 336-332 a. C.
Khababash (usurpador) c. 338-315 a. C.
LEPTIS MAGNA
Dinastía Macedónica
Reyes Griegos:
Alejandro Magno c. 332-323 a. C.
Filipo Arrideo c. 323-317 a. C.
Alejandro IV c. 317-306 a. C.
Dinastía Ptolemaica
Ptolomeos:
Ptolomeo I Sóter c. 306-283 a. C.
Ptlomeo II Filadelfo c. 282-246 a. C.
Ptolomeo III Evérgetes I 246-222 a. C.
Ptolomeo IV Filópator c. 221-204 a. C.
Ptolomeo V Epífanes c. 204-180 a. C.
Harwennefer (usurpa) c. 206-200 a. C Ankhwennefer (usurp) c. 200-286 a. C.
Ptolomeo VI Filópator c. 180-164 a. C.
Ptolomeo VIII c. 164 a. C.
Evérgetes II c. 145-116 a. C.
Harsiese (usurp.) c. 1131-130 a. C.
Ptolomeo IX Sóter II c. 116-107 a. C.
Ptolomeo X Alejandro I c. 107-88 a. C.
(Kléopatra) Berénice III c. 81-80 a. C.
Ptolomeo XI Alejandro II c. 80 a. C.
Ptolomeo XII Neos Dionisos 80-58 aC
(Kléopatra) Bérenice IV c. 58-55 a. C.
Kléopatra VII Filópator c. 51-30 a. C.
Destrucción de Cartago (actual Libia) Inicio del Dominio romano en África
Emperadores romanos:
30 a. C.-313 d. C.
Septimio Severo, natural de Leptis Magna. transformó la ciudad en una metrópoli de aspecto suntuoso.
La grandiosa basílica del foro severiano reflejaba plenamente los nuevos cánones estéticos romanos de finales del siglo II d. C.
Las columnas son de granito rojo con capiteles de mármol.
El área del foro, la basílica, las termas, el teatro, todas las construcciones atestiguan la riqueza de la antigua y espléndida Leptis Magna.
Iniciado por Septimio Severo, el foro fue llevado a término por el emperador romano Caracalla en c. 216 d. C.
El gusto arquitectónico severiano era fastuoso, escenográfico:
tenía una evidente propensión hacia los edificios con ábsides, nichos y perspectivas de grandes columnas bellamente decoradas: por eje. la calle exterior de la basílica adyacente al antiguo foro, la cual destaca por los refinados juegos cromáticos obtenidos con el empleo de distintos materiales.