Caravaggio "Baco enfermo" ("Bacchino malato" c. 1591/93 |
Michelangelo Merisi (Amerighi da Caravaggio), nacido en Caravaggio (cerca de Milán) en 1573 y muerto en Porto Ercole (Italia) en 1610, fue hijo de un arquitecto ducal.
El carácter impetuoso descrito por sus biógrafos, el "cerebro extravagante" como es definido, hicieron que su existencia fuera trágica: su vida fue una sucesión de tragedias.
Las etapas principales de una biografía errante y ajetreada se reflejan en su obra, aunque a veces de la forma más inesperada.
Hacia 1600, con los primeros encargos oficiales, la coloración clara de la época romana es reemplazada casi sin transición por su famoso claroscuro, cuyo dinamismo conecta con el dramatismo del contenido.
A partir de su estancia en Malta, va suavizándose la vehemencia de este planteamiento.
Pinta aparentemente más deprisa, por lo que las pinceladas pierden su densidad homogénea:
el fondo oscuro del cuadro queda integrado en un claroscuro menos compacto y más contrastado, que ya no es una mera representación de luz y sombras, sino el indicio de una creciente interiorización.
Caravaggio "Los jugadores de cartas" (I bari) c. 1595 |
todo el Seiscientos, la primera época de una variada y compleja crítica figurativa se ocupó ininterrumpidamente de la preponderante figura de Michelangelo Merisi en el primer decenio del siglo.
A lo largo de las sucesivas épocas, comienza a aparecer el verdadero Caravaggio:
el artista de la inimitable luz, del sentir religioso y de la composición revolucionaria, el pintor que críticos y grandes maestros de la pintura, en largos estudios y a través de inolvidables polémicas, han ofrecido a nuestra consideración.
Es decir:
el Caravaggio de una pintura nueva, compleja, irreducible a esquemas y a escuelas, como si fuera la solitaria grandeza de una poesía aún más solitaria.
"...no realiza un solo rasgo sin tomarlo directamente del modelo vivo...
...es como tener la realidad delante y seguir a la naturaleza en toda la variedad de los colores; pero ante todo es necesario que el pintor adopte el criterio de elegir de lo bello las cosas más bellas"
K. Mander "Het Leven der Moderne oft dees-tjische doorluchtighe Italiaensche Schilders" (1603)
"...el gran Primer pintor,
Maravilla del Arte,
de la Natura asombro
aun perseguido por hostil fortuna"
G. C. Gigli "La Pittura trionfante" (1615)
"...abrió una ventana por la que volvió a mostrarnos la Verdad, que se había perdido..."
G. B. Passeri "Vite de¨pittori, scultori e architetti (h. 1678)
"...es memorable en esa época porque llevó la pintura del manierismo a la verdad, lo mismo en las formas que siempre sacaba del natural que en el colorido en el que, casi desterrando los cinabrios y azules, compuso con pocas, pero verdaderas tintas, a la giorgionesca..."
L. Lanzi "Storia pittorica della Italia" (1789)
"No es la ausencia de todo defecto, sino la presencia de eminentes cualidades, lo que constituye un temperamento y hasta un genio. Algunos hombres, capaces de indomable ímpetu, no pueden resignarse a la impecable sapiencia de la mediocridad. Entre éstos, Caravaggio..."
V. Schoelcher "Salon de 1835, Revue de Paris" (1835)
"...sin maestros, sin preceptos, tanto hizo y a tanto se atrevió que ni puede decirse a dónde hubiera podido llegar de haber vivido un siglo antes, o si imitando con tanta verdad la naturaleza, hubiera aceptado las normas de los pintores de aquel siglo para embellecerla. Pero esas normas, seguidas con tanto magisterio por los discípulos de Ludovico, fueron despreciadas por él..."
G. Rosini "Storia della pittura italiana" (1839-1847)
"...ha pintado con igual elevación retratos, escenas sagradas y de género, flores y frutas. Siempre naturalista, sus pinturas tienen una extraordinaria plasticidad y a menudo una sugestiva grandeza..."
F. Villot "Notice des Tableaux...du Musée National du Louvre" (1852)
Caravaggio "Descanso en la huida a Egipto" ("Riposo durante la fuga in Egitto") 1594/96 |
P. Selvatico, "Storia estetico-critica delle arti del disegno" (1856)
"...un genio que supo llevar consigo la cultura incluso a través de los modos en que actuó las propias y personalísimas intenciones..."
A. Riegel "Die Entstehung des Barockkunst in Rom" (1907)
"Lo que verdaderamente debe tenerse en cuenta es su nueva concepción estilística. La nota que la caracteriza es una búsqueda tan tenaz de la concisión que recuerda la sobriedad de los grandes períodos arcaicos. Para ello, Caravaggio se sirve principalmente de dos medios: de la luz y de la composición. Como es bien sabido, sumerge sus escenas en la oscuridad, embistiéndolas con un chorro violento de luz rasante, de manera que sólo algunas partes afloran entre las tinieblas a la luz.
Éste, que todos y tal vez sus mismos seguidores creyeron hasta hoy hallazgo realista, fue si acaso una concesión a la fantasía, pero sobre todo fue una búsqueda de unidad y estilo: un medio de valorizar ciertas partes y líneas esenciales de las cosas, haciéndolas aflorar a la luz, y eliminando en las tinieblas otras secundarias, inútiles o dañosas para una concisa representación"
M. Marangoni "Il Caravaggio" (1922)
Caravaggio "Bacco" (c. 1598) |
Para comprender la posición que Caravaggio ocupa en la historia del arte, hay que tener presente su modo revolucionario, sin parangón, de tratar temas iconográficos tradicionales; y esto se puede decir tanto de los temas sacros como profanos.
Su Baco no es ya una divinidad antigua, no es una manifestación del Olimpo del Alto Renacimiento y del Manierismo.
Caravaggio pinta un adolescente algo vulgar, afeminado y maquillado, que nos vuelve su rostro regordete, ofreciendo vino con un gesto familiar.
Aquí no es Baco, sino un individuo ordinario disfrazado de Baco, el que nos mira tedioso y despierto a la vez.
Con esta trivialización de una figura pagana transformada en un calavera equívoco, Caravaggio es, por un lado, el gran realista que se ha alabado siempre.
Pero por otro lado, la sensual poesía de su pintura es tan convincente que sería desacertado todo pensamiento de caricatura o disfraz.
Caravaggio "Crucifixión de San Pedro" ("Crocifissione di san Pietro") 1600 |
El San Pedro de Caravaggio no es un mártir heroico, el héroe hercúleo que representó Miguel Ángel, sino un anciano que sufre el dolor y que experimenta la angustia de la muerte.
La escena es sombría, se desarrolla en algún campo pedregoso.
El fondo oscuro e impenetrable devuelve la mirada a las figuras, fuertemente iluminadas que, con la fealdad increíblemente banal de sus acciones y posiciones recuerdan al espectador que la muerte del príncipe de los apóstoles no fue un espectáculo heroico, sino una ejecución deplorable y mezquina.
"El otro medio empleado por Caravaggio para alcanzar la unidad estilística se refiere a la composición del cuadro:
obtener de un solo trazo, con no superada síntesis, el máximo resultado de sentido plástico y dinámico"
M. Marangoni "Il Caravaggio" (1922)
"...borra el valor de dibujo dado a la forma por los florentinos, huye del decorativismo, simplifica la visión de los objetos mediante un corte nítido, nocturno, entre luz y sombra; ahonda y simplifica la composición..."
A. Venturi "Disegno storico dell´arte italiana (1924)
"...lo que confusamente brotaba en él era no tanto el relieve de los cuerpos, sino la forma de las tinieblas que irrumpen...
...se reviste con el abrupto relampagueo de la luz reveladora entre los desgarrones desconocidos de la sombra..."
R. Longhi "Il Caravaggio" (1952)
"Compleja es la naturaleza de este "estilo nuevo", de esta forma única e irreducible a otra, que inventa Caravaggio. Está arraigada en la armonía de sus colores y en la particular naturaleza de su modo de pintar: armonía rara y sutil, compuesta de una específica elección de tonos y una peculiar manera d emplearlos: pintura refinada, cuya materia posee la pureza cristalina...
...con la novedad y calidad de su paleta, sorprendió a sus contemporáneos hasta tal punto que incluso los enemigos reconocieron sus méritos: en él, la misma técnica es poesía...
La originalidad de su genio está en saber colocar a los personajes en un espacio que no tiene por sí mismo existencia plástica, que no es ni definido ni limitado, sino solamente el lugar de las posibilidades plásticas, la nada de la que nacen seres y cosas, lo informe de que emergen las formas...
...del contraste que de ahí deriva entre figuras que tienen la rigurosa plenitud de la estatua y un espacio confiado a las incertidumbres del claroscuro y a mágicos misterios pictóricos, nace más sorprendente y por ello más rica en contenidos poéticos:
la monumentalidad de la composición de Caravaggio"
R. Jullian "Caravage" (1961)
Caravaggio "Coronación de espinas" ("Incoronazione di Spine") 1602/04 |
Caravaggio "David con la cabeza de Goliat" ("Davide con la testa di Golia") 1600/01 |
"Entierro de Cristo" o
"Preparación de Cristo muerto sobre la piedra de unción"
es sin duda el más monumental.
El grupo de figuras está estructurado de modo rigurosamente simétrico sobre la piedra del sepulcro, que surge diagonalmente de la profundidad de la obra.
Este cuadro procede del altar de la Chiesa Nuova de Roma, dedicado a la Piedad.
La unción del cuerpo y el descendimiento en el sepulcro son sólo los argumentos acompañantes de la lamentación de la Virgen, que ocupa el puesto central.
Nada separa más las obras de historia de Caravaggio del arte del Renacimiento que su renuncia a representar la figura humana bella, noble y heroica.
Sus personajes aparecen abatidos, agachados, acuclillados, tumbados o al menos cabizbajos.
La presentación estatuaria ha cedido a una nueva forma.
Caravaggio sostenía el principio de que no son los conceptos abstractos o las ideas filosóficas las que hay que extender sobre el lienzo sino el conocimiento de la realidad, las cosas tal como son, indagadas y exploradas en sus relaciones de lugar, espacio y luz.
Las cosas por sí solas expresan ideas, filosofía e historia, porque de ellas se libera el presente y su sonido, la nueva condición humana, las nuevas relaciones entre los seres humanos, ya que a ellos les pertenecen las cosas y la historia.
Para Caravaggio:
el concepto de belleza como una búsqueda de la verdad.
Michelangelo Merisi -Il Caravaggio- "Entierro de Cristo" ("La Deposizione di Cristo") 1602/03) |