de Principado, Sometido por los Mongoles al Imperio Ruso
La actual Rusia tiene su origen en el principado de Moscovia, uno de los territorios autónomos del principado de Susdal en el siglo XIII, a raíz de la invasión de los mongoles.
Situado en una zona estratégica, en que confluían las rutas del Báltico, del mar Negro y de Siberia, el principado de Moscovia incrementó sus dominios.
A pesar de esta expansión, se veía obligado a pagar tributos a los mongoles, situación que se prolongó hasta el reinado de Iván III (1462-1505).
Este monarca se libró de la tutela extranjera y se proclamó heredero del Imperio bizantino.
Consideraba que Moscú, tras la caída de Constantinopla en 1453, era:
"la nueva Roma"
El principado prosiguió su engrandecimiento durante el siglo XVI.
En el mapa se observa la expansión de Moscovia, y las conquistas territoriales:
el reinado de Iván IV -denominado Iván el Terrible- (1530-1584), primer Zar de todas las Rusias.
Según los historiadores, influido por las humillaciones sufridas en su niñez a manos de la aristocracia, Iván IV dedicó su vida a fortalecer el papel de la monarquía, recurriendo para ello a la más sangrienta represión.
Una vez en la cima del poder, controlado por completo el interior del país, inició una serie de ambiciosas conquistas que desplazaron sus fronteras más allá de los Urales.
Existe en la historia rusa un antes y un después de Iván IV.
A su muerte, el suyo era un país grande y fuerte, que limitaba al sur con el mar Caspio, al este con los montes Urales y tenía ya asentamientos en la costa del Báltico.
Iván IV, además, abrió Rusia al mundo occidental:
estableció relaciones con Inglaterra y otras naciones del norte de Europa;
permitió a los mercaderes británicos utilizar el puerto de Arkhangel, en el mar Blanco;
acabó con la amenaza permanente de los tártaros, instalados en Rusia desde los tiempos de Gengis Khan (1162-1227);
emprendió reformas en el Ejército y la maquinaria administrativa;
creó una Iglesia nacional, que sometió a su poder;
y puso los cimientos de una autocracia (zarismo) que gobernó sin interrupción el mayor país europeo durante cuatrocientos años.
Su biografía es considerada por los historiadores como algo contradictoria.
Al parecer, los enormes logros políticos de Iván IV fueron parejos a algunos hechos considerados como atrocidades:
sometió al pueblo y a los nobles (boyardos) con la horca y el látigo, y su furia no respetó a nadie, ni siquiera a su propio hijo, al que mató en una arrebato de ira.
Al final de su reinado creó la Oprichnina: una especie de policía estatal y guardia personal que sembró el terror en el conjunto del país.
Esta actuación contradictoria marcada por la disparidad de su carácter, es lo que ha hecho de Iván IV una figura histórica controvertida y paradójica.
Máscara mortuoria de Elena Vasilievna Glinskaya (1510-1538) Princesa de origen mongol, Elena Glinskaya fue la segunda esposa de Vasili III de Moscovia y la madre de Iván IV Vasílievich de Rusia. |
Iván IV Vasílievich
1530: El 25 de agosto nace en Moscú Iván Vasílievich, hijo de Vasili III de Moscovia (1479-1533) y de Elena Vasilievna Glinskaya (1510-1538).
1533: Muerte de su padre, el gran Vasili III de Moscovia.
1547: el 16 de enero se celebra la coronación de Iván IV Vasílievich.
El poder queda en manos de los Glinski.
1547: Iván IV se casa ocho días después con la primera de sus ocho esposas, Anastasia Romanovna Zajarina (1530-1560).
1547: En junio se producen incendios provocados en Moscú.
1547: Iván IV depone a los Glinski y asume el mando.
1552: Inicia la conquista del khanato de Kazán, que culmina en cinco meses.
1554: Emprende la conquista del khanato de Astrakhan.
Nace su hijo Fiódor Ivánovich (1557-1598).
1558:
En enero inicia la conquista de Livonia
1558:
Polonia, Lituania y Suecia le declaran la guerra.
1571: Los tártaros de Crimea saquean e incendian los alrededores de Moscú.
1581: Iván IV mata a su hijo mayor Iván Ivánovich en un arrebato de ira que después lamentará toda su vida.
1582: Nace su hijo Dimitri Ivánovich (1582-1591).
1582: Firma la paz con Polonia, Lituania y Suecia y renuncia a los territorios bálticos ocupados.
1584: El 18 de marzo muere en Moscú el Zar Iván Vasílievich IV.
Figura Histórica Paradójica
Como señala uno de sus biógrafos, el pequeño Iván fue adquiriendo un carácter mórbido y excitable.
Su timidez natural se transformó pronto en terror nervioso, y en su desvarío, dio rienda suelta a sus frustraciones.
Los boyardos empezaron a respetarle a sus trece años.
Apresó al príncipe Andréi Shuyski sacándole del Kremlin y, según narran las crónicas:
ante la muchedumbre, el príncipe fue arrojado a una jauría de perros hambrientos que lo despedazaron.
Sin embargo, la crueldad constituía sólo una de las facetas de Iván.
A los dieciséis años era un joven corpulento y musculoso, excelente jinete y aficionado a la lectura;
conocía a fondo la Biblia, podía escribir con soltura y estaba dotado de elocuencia natural;
estudió retórica bajo la influencia de Macario (1482-1563), arzobispo de Nóvgorod, que insistía en el principio bizantino de atribuir el poder terrenal al derecho divino y considerar Moscú como la tercera Roma, una vez conquistada Constantinopla por los turcos;
introdujo la imprenta en Rusia e impulsó las letras y las artes;
pese a su crueldad, Iván IV era un cristiano devoto que cumplía escrupulosamente con el ritual de la Iglesia ortodoxa, aunque no vacilaba en ejecutar a clérigos sospechosos de deslealtad o desobediencia.
Coronación del Zar
Iván Vasílievich IV fue coronado en la catedral de la Asunción del Kremlin en 1547.
El arzobispo Macario le invistió con los emblemas de su cargo y le coronó dos veces, primero como gran príncipe y luego como Zar, término que significaba:
"rey que no rinde tributo a ningún hombre"
Pocos días después de la coronación, se casó con Anastasia Romanovna Zajarina (1530-1560), que sería la primera de sus ocho esposas y la más querida.
Al principio de su reinado, las funciones del gobierno estaban en manos de la facción que encabezaban los príncipes Yuri y Mijaíl Glinski, hermanos de la madre de Iván IV, quienes extendieron la corrupción y los abusos a todos los rincones de Rusia: las extorsiones e injusticias alcanzaron extremos increíbles.
A finales de la primavera de 1547, una serie de incendios provocados destruyeron distritos enteros de Moscú, ciudad que era muy vulnerable al fuego por estar construida casi enteramente de madera. En uno de ellos murieron más de dos mil personas. Corrieron rumores de que los incendios eran obra de los Glinski.
Para restaurar el orden, Iván desterró al príncipe Mijaíl Glinski y a su madre y empezó a reconstruir con rapidez el área central de Moscú, que había quedado arrasada.
Organizó un consejo electo, de carácter consultivo, con participación de mercaderes y pequeña nobleza, para consolidar la administración central y reducir el poder económico de las facciones boyardas.
Los Boyardos
Vasili III de Moscovia, padre de Iván IV, había fortalecido durante su reinado el poder de la monarquía a expensas de los boyardos, la intrigante y ambiciosa aristocracia de la época.
A su muerte, los boyardos aprovecharon la minoría de edad de Iván para recuperar los privilegios perdidos, comenzando entonces una dura y sangrienta lucha por el poder entre las principales familias de la nobleza: los Gluski, los Shuyski y los Belski, con la consiguiente sucesión de muertes y destierros.
El futuro zar, Iván, nunca olvidó los desmanes y la arrogancia de aquellos potentados que trataban a su soberano como si fuera un forastero, y escribió:
"Nuestros boyardos gobernaban el país a su antojo, porque nadie ponía coto a su poder"
El Ejército de Iván IV Vasílievich de Rusia
Consolidado en Moscovia, Iván IV se encontró al frente de un importante ejército.
La primera oleada de reformas afectó al gobierno local y central, al sistema de justicia y a la Iglesia, que poseía cerca de una tercera parte de toda la tierra cultivable de Moscovia y disfrutaba de una serie de privilegios especiales.
Se modificaron muchas leyes, los castigos se reglamentaron y se estableció un sistema de departamentos de gobierno o ministerios, como los relativos a asuntos exteriores, tierra, ejército, justicia y hacienda:
una meticulosa contabilidad aminoró la corrupción.
Para reforzar el papel de la nobleza, se les adjudicaron tierras cercanas a Moscú.
Sin embargo, la concesión de tierras a los nobles que prestaban servicio obligatorio al zar tuvo consecuencias muy negativas para el campesinado.
Muchas de esas tierras estaban trabajadas por campesinos libres, quienes pasaron a ser siervos, como si fueran esclavos atados de por vida a las haciendas de sus amos.
Además, por medio de un edicto, se prohibía a estos campesinos cambiar de residencia, lo que equivalía a hacerlos absolutamente dependientes de sus amos, perdiendo para siempre su libertad.
En el nuevo código legal que Iván IV y sus consejeros promulgaron para Rusia había, no obstante, algunas leyes que mejoraban la situación anterior:
se castigaba la corrupción judicial y se incluían medidas para reducir la esclavitud, prohibir la venta de niños, y establecer la emancipación de todo esclavo que huyera de la cautividad de los enemigos del zar.
Policía del Estado: La Oprichnina
Los oprichniki (miembros de la policía) estaban a las órdenes directas de Iván IV, vestían de negro y montaban caballos negros.
Su misión: limpiar Rusia de enemigos del zar y la vigilancia permanente.
En enero de 1570, basándose en acusaciones infundadas de traición del arzobispo de Nóvgorod, descargaron un golpe terrible sobre esta antigua ciudad:
Nóvgorod fue incendiada y saqueada.
Algunos cronistas calculan que casi 60.000 habitantes fueron masacrados, y después de la matanza, la hambruna y las epidemias, extendieron más muerte por todo el territorio.
Aquel mismo año, las matanzas y las ejecuciones en masa continuaron en Moscú.
Un gran número de familias nobles fueron completamente exterminadas, incluyendo a los campesinos a su servicio, sometiéndoles previamente a torturas.
Según los cronistas, muchos eran ahogados, estrangulados o azotados hasta la muerte, pero tampoco resultaron infrecuentes los empalamientos o las víctimas quemadas vivas en la hoguera.
Los oprichniki, propietarios de las tierras expropiadas, formaron una nueva nobleza, impidiendo así que se formara un régimen feudal en el país.
La Oprichnina eliminó todo vestigio del poder aristocrático.
Fin Dinástico
El zar Iván IV constituyó una desconcertante mezcla de barbarie que no estaba exenta, por otra parte, de un afán civilizador.
Según los historiadores, fue una de las principales figuras de la historia rusa: una figura paradójica y controvertida.
En su lecho de muerte, Iván IV nombró regente a su favorito, Boris Godunov (1551-1605), que había contribuido a organizar su sistema social y administrativo.
Quiso que lo fuese hasta que su hijo Fiódor I Ivánovich (1557-1598), deficiente mental, ocupara el trono. Éste fue coronado en 1584.
Con él se extinguía la casa de Rurik, ya que el otro heredero de Iván, su hijo Dimitri Ivánovich (1582-1591), había muerto unos años antes degollado.
A Godunov se le solía atribuir su asesinato.
Tras la muerte de Fiódor I Ivánovich, la clase dirigente proclamó zar a Godunov.
Bajo su reinado, se alentó la colonización de Siberia y se siguió con la política de Iván IV de reforzar el poder de funcionarios a expensas de los boyardos.
Sin embargo, las hambrunas del principio del siglo XVII minaron su apoyo.
Una insurrección en Moscú terminó con la vida del soberano.
A su muerte, su hijo Fiodor II fue incapaz de defender a un Dimitri impostor que fue coronado zar.
Le sucedió Vasili IV Shuyski (1552-1612).
Empezaron a aparecer impostores por doquier que pretendían acceder al trono:
en 1607, un segundo Dimitri marchó sobre Moscú con cierto éxito, pero murió asesinado en 1610;
dos años después, un individuo que se presentó como hijo de Dimitri murió estrangulado;
y un cuarto personaje, también autoproclamado hijo de Dimitri, acabó decapitado en 1613.
Fue el año en que se puso fin al caos reinante con la coronación como zar del primer Romanov:
Mijaíl Fiódorovich Romanov (1596-1645)