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sábado, 7 de julio de 2018

Reflexión Crítica





Guy Denning







Algunas actitudes básicas imprescindibles en un psicólogo son la
empatía y la calidez:
ambas se muestran, en ciertos casos dilemáticos, desde una perspectiva interesante.


Empatía

En este ámbito, empatía se entiende como:
"capacidad del psicólogo para comprender al paciente en sus preocupaciones cognitivas y emocionales, y para transmitirle dicha comprensión".

Ser empático significaría: 

entender los problemas del otro; 
poder captar sus sentimientos;
ponerse en su lugar; 
confiar en su capacidad para salir adelante; 
respetar su libertad;
respetar su intimidad; 
no juzgarle; 
aceptarle como es; 
aceptarle tal y como quiere llegar a ser; 
ver al otro desde él mismo; y 
no desde nuestras propias necesidades o problemas.


Es aquí, donde se percibiría cierta ambigüedad:
"ver al otro desde él mismo y no desde nuestras propias necesidades o problemas".

Por una parte, el psicólogo debe mostrar una actitud de cercanía emocional con los problemas del paciente y por otra, debe mantenerse lo suficientemente distante cognitiva y emocionalmente como para permitirse observar y realizar hipótesis diagnósticas congruentes y válidas. 

Esta disociación podría mantener al psicólogo en una constante división interna.

Su actitud ética le impide implicarse emocionalmente hasta el punto de perder la objetividad:
no debe permitir que emociones humanas como empatía y compasión actúen libremente.

Es una actitud ambivalente "cercanía-distancia".


La empatía presupone tres condiciones básicas:

1. congruencia consigo mismo (vivir como se piensa);

2. aceptación incondicional positiva del otro;

3. esfuerzo por ponerse en el lugar del otro, sin dejar de ser uno mismo.




Calidez

La calidez puede resultar, asimismo, algo ambivalente en la relación terapeuta-paciente.

El aspecto de la polaridad entre lejanía y distancia emocional debe ser equilibrado con lo que se conoce como "actitud de cercanía", que consiste en una aproximación afectiva.

Sería una actitud de "acogida-contención"

Esa ambivalencia, o coexistencia de actitudes emocionales opuestas hacia un paciente o hacia una misma situación (acogida-contención) hace que dicha "actitud de cercanía" resulte confusa.




Reflexión Crítica

La actividad del psicólogo se rige por los principios de convivencia y de legalidad establecidos en una sociedad democrática:
el psicólogo tendrá en cuenta las normas que rigen en el entorno social en que actúa y rechazará toda clase de impedimentos o trabas a su independencia profesional.

Un aprendizaje fundamental en relación al rol del psicólogo clínico es que éste:

a) debe tener la capacidad para resolver conflictos y problemas observando los componentes éticos;

b) debe mantener una actitud de reflexión crítica y ética en el desarrollo del ejercicio profesional.

La actitud de reflexión crítica, esa actitud preventiva y alerta ante las vulneraciones éticas, es realmente fundamental.

Sin embargo, alguien ajeno al ámbito de la Psicología Clínica podría tener quizá algunas dudas al respecto, plantearse algunas preguntas acerca de esa especie de ambigüedad:
es decir, la actitud ambivalente "cercanía-distancia", así como la ambivalencia "acogida-contención" .


Por lo tanto, alguien podría tal vez cuestionarse:

1. Si una actitud de "cercanía emocional" puede ser congruente con el hecho de mantenerse distante cognitiva y emocionalmente.

2. Si el hecho de no permitirse emociones humanas como empatía o compasión, puede significar una "aceptación incondicional".

3. Si el esfuerzo por ponerse en el lugar del otro es coherente con esa disociación, con esa constante división interna "cercanía-distancia".

4. Si la "actitud de cercanía" puede ser congruente con la coexistencia de actitudes emocionales opuestas:
 es decir, con esa ambivalencia, con esa polaridad "acogida-contención".





Brumas

Lanbroa Volver.. ...y la lluvia en mis ojos y la niebla en mis labios... ...y esas brumas de plata que recue...

Brumas (Lanbroa, 15 de agosto de 2018)

Volver....................y la lluvia en mis ojos y la niebla en mis labios..............y esas brumas de plata que recuerdo y amo...............y esa nostalgia.......................hace tantas lluvias que no volvía............................. Respiro..................y el mar en mi norte y el norte en el viento..............y esos verdes y grises que añoro........que amo...............y esa sensación........................hace tantos mares que no volvía.............................. Llego.....................y las lágrimas en las nubes y el silencio en los tejados...........y esas brumas de musgo que conozco y amo.............y ese dolor.....................hace tantas lágrimas que no volvía.......................... Sonrío....................y la sonrisa en la ventana y la hiedra en los abrazos.........y esas brumas de otoño que adoro........que amo..............y esa alegría..................hace tantas sonrisas que no volvía........................... Hablo.....................y hay silencios que gritan palabras calladas..............y hay voces antiguas en las brumas de nácar..............ese extraño lenguaje que comprendo y amo...............y esa emoción......................... hace tantos silencios que no volvía.............. .............. .............. .............. .............. .............. .............. .............. .............. .............. .............. .............. ..................... .............. .................. .............. .............. ........... Y recuerdo...............los días pasados..........las caricias perdidas..........las manos de seda..........los besos dormidos..............y esas brumas del tiempo que tanto he amado.....................y esa belleza........................ hace tanto amor que no volvía.....................