"Über Gewissheit" ("Sobre la Certidumbre"):
"Die Grenzen meiner Sprache bedeuten die Grenzen meiner "Welt"
("Los límites de mi lenguaje son los límites de mi "mundo")
"...soll man sagen, dass die Sicherheit nur ein konstruierte Punkt ist, dem sich manches mehr, manches weniger nähert? Nein. Der Zweifel verliert nach und nach seinen Sinn. So ist eben dieses Sprachspiel"
(¿...hemos de decir que la certeza es meramente un punto construido al que algunas cosas se aproximan más y otras menos estrechamente? No. La duda gradualmente pierde sentido. Este juego de lenguaje "es" precisamente así")
"Wenn sich die Sprachspiele ändern, ändern sich die Begriffe, und mit den Begriffen die Bedeutungen der Wörter"
("Cuando los juegos del lenguaje cambian, entonces hay un cambio en los conceptos, y con los conceptos cambian los significados de las palabras")
"Ich mache Behauptungen die Wirklichkeit betreffend mit verschiedenen Graden der Sicherheit. Wie zeigt sich der Grad der Sicherheit? Welche Konsequenzen hat er?"
("Hago aserciones acerca de la realidad, aserciones que tienen diferentes grados de seguridad. ¿Cómo se revela el grado de seguridad? ¿Qué consecuencias tiene?")
"Kann man sagen: "Wo kein Zweifel, da auch kein Wissen"?
("¿Es posible decir: "Donde no hay duda tampoco hay conocimiento?")
"Braucht man zum Zweifel nicht Gründe?"
("¿No se necesitan fundamentos para la duda?")
"Wohin ich schaue, ich finde keinen Grund, daran zu zweifeln, dass..."
("Por donde busqué, no encuentro fundamento para dudar de que...")
"Ich will sagen: Wir verwenden Urteile als Prinzip des Urteilens"
("Quiero decir: Usamos juicios como principio del juicio")
Ludwig Wittgenstein inspiró a dos escuelas de pensamiento diferentes.
Sus primeras contribuciones inspiraron el positivismo lógico, mientras que sus elaboraciones posteriores inauguraron la y anticiparon temas que más tarde desarrollaría la filosofía continental, como el deconstruccionismo.
"Tractatus Logico-philosophicus" (1921)
Utilizaba un estilo muy particular en sus escritos filosóficos, pues resaltaba las conclusiones provocativas en lugar de los argumentos.
Sus trabajos son todo un desafío y plantean preguntas fundamentales sobre la naturaleza de la propia filosofía.
Inicialmente, Ludwig Wittgenstein cursó estudios de ingeniería, pero en 1911 ya estudiaba filosofía en Cambridge y fue alumno de Bertrand Russell (1872-1970).
Cuando estalló la I. Guerra Mundial, se unió al ejército austriaco.
En 1918, durante un permiso, completó su primer libro:
"Tractatus Logico-Philosophicus", publicado en 1921.
En esta obra, Wittgenstein afirmaba que el mundo está compuesto de hechos, no de objetos, como generalmente se asume:
"El mundo es la totalidad de los hechos, no de las cosas"
Si el mundo estuviera integrado por objetos, la relación entre las frases del lenguaje y el mundo sería oscura.
Pero las frases expresan hechos, de modo que si el mundo está compuesto de hechos, es posible afirmar que las frases y el mundo tienen formas similares.
La publicación del "Tractatus Logico-philosophicus" marcó una época, a partir de la cual surgirían numerosas escuelas.
Tal es la riqueza de la obra, que aún hoy aparecen nuevas interpretaciones de esta obra, en la que algunos llegan a ver la palabra de un místico.
Según el pensamiento filosófico de Wittgenstein, entender una frase es saber qué hecho tiene que ser cierto para que esta frase sea verdad.
Ya que infiere de lo anterior que las frases sólo pueden representar hechos contingentes, hechos que podrían ser falsos.
Esto no significa que no haya verdades necesarias, tan sólo que éstas no pueden ser expresadas en el lenguaje.
Para Wittgenstein, las reglas de la lógica son así:
no son hechos, sino principios generales que dictan la estructura de los hechos.
Sugiere que la verdades éticas también pueden entrar en esta categoría de verdades necesarias que gravitan sobre el cambiante mundo de los hechos.
El Tractatus es de lectura difícil e irrita tanto a estudiantes como a eruditos. Incluso es posible que Bertrand Russell, que escribió la introducción original, no lo entendiera completamente.
El propio Wittgenstein dijo, enigmáticamente, que la verdadera importancia del Tractatus residía en lo que no hace y no puede decir.
¿Puede haber un lenguaje privado?
De todas las contribuciones filosóficas de Wittgenstein, la más discutida es la del lenguaje privado. Existen muchas interpretaciones de este argumento, pero una lectura estándar podría resumirse así:
Imagine una persona que inventa un lenguaje que sólo ella puede entender.
Un día, esa persona experimenta una sensación particular y le da nombre. Posteriormente experimenta otra sensación que considera igual a la primera, y la denomina con el nombre acuñado en la ocasión anterior.
¿Se puede decir que la persona ha hecho lo correcto replicando el término?
Wittgenstein piensa que no es posible decir que sí y tampoco decir que no.
Las palabras sólo pueden ser correctas o incorrectas cuando existen criterios públicos para usarlas correctamente.
Suponga, por ejemplo, que el hombre recuerda mal su sensación anterior.
Podría sentir la tentación de decir que se equivoca al usar esa palabra privada en esta segunda sensación.
Pero tal vez su palabra haga referencia a un rango de sensaciones más amplio y sea correcto a aplicarla a ambas sensaciones.
Sólo él tiene autoridad para determinarlo, pero él tampoco puede estar seguro de si está haciéndolo bien. Los lenguajes reales son públicos, y las comunidades de hablantes determinan cuándo usar las palabras.
Por tanto, un lenguaje verdaderamente privado, utilizable por una sola persona, no contaría como lenguaje.
Muchos filósofos fueron persuadidos por el argumento de Wittgenstein cuando lo expuso originalmente, pero hoy en día algunos mantienen diferentes posturas al respecto.
La filosofía de Wittgenstein abarca diverso períodos, entre los que debe destacarse aquel en que acoge la influencia de otra de las ciencias más influyentes de la época: el psicoanálisis.
Así crea el psicoanálisis filosófico, cuya función consiste en liberar al paciente de los complejos intelectuales, que no son problemas sino meras tautologías.
Wittgenstein dedicó el último año y medio de su vida a la redacción de su obra "Über Gewisheit", definida como: "una batalla contra el embrujamiento de la inteligencia por medio del lenguaje". Según Wittgenstein:
"Die Schwierigkeit ist, die Grundlosigkeit unseres Glaubens einzusehen"
("La dificultad consiste en comprender la falta de fundamento de nuestra creencia")
"Liegt es denn in meiner Macht, was ich glaube?, oder was ich unerschütterlich glaube?"
("¿Es que es posible que esté en mi poder lo que yo creo? ¿O lo que inquebrantablemente creo?")
"Ich handle mit voller Gewissheit. Aber diese Gewissheit ist meine eigene"
("Actúo con "completa" certeza. Pero esta certeza es la mía")
"Man macht sich ein falsches Bild vom Zweifel"
("Uno se hace una falsa imagen de la "duda")
"Ist mein Verständnis nur ein Blindheit gegen mein eigenes Unverständnis? Oft scheint es mir so"
("¿Es mi comprensión sólo una ceguera contra mi propia falta de comprensión? Así me parece con frecuencia")
"Man wird oft von einem Wort behext; zum Beispiel, vom Wort "wissen"
("A menudo uno está embrujado por una palabra; por ejemplo, por la palabra "saber")
"Kann es denn nicht sein, dass ich mir "einbilde" etwas zu "wissen"?
("¿Entonces, no es posible que me "imagine" que "sé" algo?")